Gasoducto entre España e Italia para reducir la dependencia energética de Europa

El proyecto del gasoducto es una apuesta fuerte por parte de la Comisión Europea que quiere independizarse del gas ruso.

Este proyecto es muy ambicioso y podría conectar Barcelona y Livorno para abastecer a Italia con combustible regasificado.

Habría que invertir 2.500 millones de euros y serían 700 kilómetros que conectaría ambas ciudades europeas a través de conexiones submarinas.

Italia recibiría los fondos de Europa para garantizar el suministro a los países europeos del norte y España actuaría como potencia regasificadora ya que recibiría el gas de países africanos y lo enviaría al resto de Europa a través de esta conexión.

Las empresas que se encargan de la gestión de esta red serán Enagás y Snam.

Antiguos proyectos

Europa está buscando la manera de conectarse entre si para depender menos de países como Rusia, pero muchos proyectos de gasoductos se han quedado atrás, como por ejemplo el que conectaría a Argelia con Europa, a través de Barcelona. Otro proyecto es el Midcat, que lleva parado desde 2019 pero que Europa ve muy posible retomarlo por el conflicto de la invasión de Rusia a Ucrania.

España cuenta con varias plantas de regasificación activas y Portugal tiene otra más, por lo que la Península Ibérica se convierte en un fuerte aliado para que Europa sea abastecida. Pero la falta de conexiones con el resto de los países europeos hace esta tarea más difícil y ahora se han dado cuenta.

Italia cuenta con tres plantas de regasificación, pero no tiene ninguna conexión con Argelia o Libia, que son los países de los que obtiene la gran mayoría del gas natural España. Si no se remedia, seguirá Europa temiendo las amenazas de Rusia con el gas natural.

Alemania, por su parte está estrechando lazos con Senegal para asegurar su suministro y no depender de Rusia y sus caprichos.

Fuente: motorpasion.